Por la noche todo es recogimiento y silencio. Nuestra madre Soledad con su incomparable belleza y solemnidad, recorre sus calles en un silencio únicamente roto por el rezo del Rosario de sus fieles.
Por la noche todo es recogimiento y silencio. Nuestra madre Soledad con su incomparable belleza y solemnidad, recorre sus calles en un silencio únicamente roto por el rezo del Rosario de sus fieles.