La Colina de las Cruces (Lituania).
Un lugar singular de devoción.
Entre los países llamados bálticos hay tres que por proximidad y características asociamos enseguida: Estonia, Letonia y Lituania. Tienen mucho en común que los une y al mismo tiempo mucho que los separa. Tienen idiomas propios e igualmente costumbres, sin embargo en lo religioso sí tienen una diferencia substancial. Mientras los dos primeros son mayoritariamente luteranos y ortodoxos, en el tercero, es decir Lituania, la religión mayoritaria es la católica. Sí son todos muy practicantes de sus respectivas creencias, sobre todo Lituania, que es el que nos ocupa.
Adquiere mucha influencia de Polonia que, como es sabido, llama la atención por su forma de vivir la religión. Ejemplo de religiosidad polaca es ver a cualquier hora del día o la noche a muchas personas de rodillas delante de los templos aunque estén cerrados. Con esta influencia y la de otros países por los que durante mucho tiempo han sido ocupados, han heredado una preparación religiosa extraordinaria. En los actos religiosos se suelen ver más jóvenes que de otras edades y su comportamiento en los mismos es ejemplar.
Sirva esta introducción para que sabiendo algo más de este pueblo, podamos comprender un poco mejor el tema a tratar en este artículo, que no es otro que: “LA COLINA DE LAS CRUCES”.